y retornamos complacidos la tarde de ayer;
a nuestro Manzanillo de tradiciones gloriosas
y de insignes patricios de gran merecer.
Poseemos venturosamente, regiones hermosas,
Parques, Glorieta, que es orgullo tener,
jóvenes estudiosos, chicas primorosas,
poetas, sociedades, Y belleza de mujer.
El Guacanayabo, de color verdemar, a veces divierte
a los que concurren a la playa, que se revierte
ofreciendo júbilo y grata fantasía.
Para los Carnavales llegan los viajeros
a admirar las Comparsas y sones callejeros,
mientras a veces sueño feliz con la reina mía.
Ernesto Ramis. 1920.
Fuente: El Eco de Manzanillo. Septiembre de 1951.
Fecha de publicación en Enciclopedia Manzanillo: 2007.