Datos biográficos de Evangelina Griselda Bello Martín, miembro del Ejército Rebelde.
Nació en Manzanillo el 13 de mayo de 1936. Sus primeros estudios, hasta el 4to. grado, los cursó en la escuela Carlos Manuel de Céspedes, luego pasa a la Escuela Intermedia de hembras donde alcanza el 7mo. grado y más tarde en la Escuela superior hasta el 8vo. grado.
Muy joven comienza a prepararse como auxiliar de enfermería en el hospital Caymari junto con el doctor René Vallejo Ortíz, de quien recibe notable influencia política; se vincula a la lucha clandestina junto con César Suárez y Leoncio Leyva a pesar de la oposición de sus padres.
Marcha hacia la Sierra Maestra y por su destacada actividad integra el pelotón de Mariana Grajales. Durante su estancia guerrillera fungió primero como costurera -haciendo brazaletes-, y luego como cocinera, labor en la cual recibía el insistencia del Che de que había que preparar bien los alimentos. Como soldado y formando parte de la columna No. 1 comandada por Fidel Castro participa en los combates de Cerro Pelado, El Naranjo, Santo Domingo y la batalla de Guisa. Su bautismo de fuego ocurrió en el combate de Cerro Pelado (27 de septiembre de 1958), acción en la cual es herida y recibe una quemadura en un muslo. Se desempeñó además como correo entre los campamentos de Cerro Pelado, Las Mercedes, Santo Domingo y La Plata, terminando la guerra en Guisa.
Después del triunfo revolucionario permanece seis meses en el Ejército Rebelde; más tarde, ya en lo civil, trabaja en el Retiro Tabacalero y Marítimo y en la Delegación Central 17 de Ciego de Ávila.
En su tierra natal y ahora como dirigente de la FMC, desempeña un activo y destacado papel como Secretaria del Distrito No. 2 en Barrio de Oro.
En un encuentro sostenido en La Habana entre combatientes del Ejército Rebelde conoció a Jesús González García, con quien se casa y de cuya unión nacieron 7 hijos, llamando al mayor de ellos Fidel en honor al líder de la Revolución Cubana. Junto con su esposo dirige en la ciudad la Casa de las Madres de los Mártires.
Eva, como cariñosamente le llamaban, se caracterizaba por su humildad, sencillez y sincero desinterés, pues, estando muy enferma, nunca pidió nada porque aseveraba que nada había hecho para reclamar algo. Muere, después de penosa enfermedad -pobre, sin posesiones materiales pero con firmeza y dignidad revolucionaria-, el 23 de agosto de 1979 cuando sólo tenía 43 años de edad.
Fecha de publicación en Enciclopedia Manzanillo: 2007.
Modificado: Jueves 30 de Junio de 2016


